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puntos de luz
04 Abr, 2024

La importancia de los puntos de luz en el diseño arquitectónico

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La manipulación de la luz permite crear efectos genuinos tanto en el diseño interior de una vivienda como en su arquitectura. Definir los puntos de luz de un inmueble es también analizar su arquitectura para aprovechar al máximo todo el potencial estético y funcional de una buena iluminación. 

¿Cómo integrar la luz en el diseño y su planificación?

La luz desempeña un papel protagonista en el diseño arquitectónico de los edificios. Desde el punto de vista estructural, establecer por dónde y de qué manera va a entrar luz natural en las estancias es definir la propia estructura del inmueble.

Pero esta planificación de la iluminación también debe tener en cuenta el diseño interior. Desde una perspectiva estética, la luz es una herramienta más para la creación de espacios personalizados. Para ello es necesario estudiar su relación con otros elementos como las formas, los colores o las texturas.

Una de las particularidades de la luz natural es que se trata de un elemento cambiante. Esto también influirá en la coherencia del diseño arquitectónico y en la búsqueda de las soluciones de iluminación más funcionales y eficientes.

Por último, se debe integrar en este estudio el papel que va a desempeñar la luz artificial. Trabajar con otras fuentes de iluminación artificial como fluorescentes, halógenos o LED ayudará a modificar las sensaciones que transmiten los espacios, resaltar formas y volúmenes y convertir la luz en un elemento decorativo más. 

Crear un nuevo concepto del espacio con diseño de iluminación

El equilibrio entre iluminación natural e iluminación artificial es único para cualquier proyecto de arquitectura. Sin embargo, la triple función que desempeña un buen diseño de iluminación en el aspecto arquitectónico es extensible a cualquier propuesta. 

La planificación de la luz para un inmueble se realiza desde una triple perspectiva: 

  • Funcionalidad: la función más básica de la luz es la de acabar con la oscuridad. En un sentido más amplio, no es solo una cuestión de iluminar, sino de resaltar determinados elementos de la arquitectura o de la propia decoración.
  • Estética: una buena planificación de la luz permitirá crear sensaciones. La iluminación es un aspecto clave en las tareas de interiorismo porque ayuda a manipular los espacios para generar efectos decorativos impactantes.
  • Eficiencia: el diseño arquitectónico está cada vez más concienciado de la necesidad de proporcionar soluciones eficientes. La correcta iluminación de un inmueble se traduce en un mayor aprovechamiento de los recursos y en unos resultados más sostenibles.